viernes, diciembre 31, 2010

Oscuridad

Siempre hay una oscuridad que va más allá que la simple ausencia de luz. Esa que persiste hasta en el día más soleado y las noches iluminadas por luna llena. Esa oscuridad eres tú, abarcas todo. Hasta que se apoderó de mi, y ahora la oscuridad, esa soy yo.

miércoles, diciembre 29, 2010

Pesadillas

Ya no se oyen pasos en el pasillo,
los pensamientos danzantes son
un lejano recuerdo.
Ahora sólo está mi cabeza, grande
y helada, sin rincones donde esconderme
caigo en su juego, y una vez más se
apodera de mi para jugar entre pesadillas
cada noche a las tres de la madrugada.

Alas

A menudo le sucede que cae en picada, luego de estar allá arriba por un tiempo. Pero siempre regresa a buscar sus alas maltratadas, desgastadas, no usadas. A veces suele olvidar como hacerlo, como volar. Pero sólo tiene que ir hasta la montaña más alta y lanzarse al vacío de la incertidumbre para golpearse con las piedras del acantilado, y de nuevo intentar subir una vez. Quizá esta vez llegue alto, tan arriba que se quemará por completo como una polilla en una noche de lluvia.

miércoles, septiembre 01, 2010

Lo que está abajo

Nunca escuchaste lo que quise decir realmente, siempre lo que tú querías. Nunca se trató de insignificantes gestos físicos. Siempre fue otra cosa, esa que no podemos ver. Esa en tu cabeza, que escapa de mi.
Odio que nunca lo hayas dejado ir. Siempre en cada letra está, en tus sueños. Quiero borrar tu musa con esta goma rosada, quiero quemar tus hojas de líneas azules y pedazos de recuerdos.
Siempre se trató de ti y tus aclamadas de vestidos blancos. Y tú crees que es como olvidar mi canción favorita.
Siempre se trató de tu afán por hacer sublime a quien no tenia gracia.
Siempre se trató de tus memorias y yo luchando para ver cual quedaba. Sólo que esta vez ya no tengo fuerzas.
Supongo que los grandes pájaros del espacio podrán más que hechos, porque yo sólo soy una palabra en una jaula.

miércoles, agosto 25, 2010

Las noches en las que vuelo.

A veces en la penumbra de una noche cualquiera sueño que puedo volar. Alcanzar nubes oscuras. Rozar tus alas en lo alto del negro cielo.
Encontrar la manera de tocar tus sueños, estar por una vez a tu lado, en tu camino de viento donde susurran cosas que los mortales no podemos escuchar.
A veces en la penumbra de una noche cualquiera sueño que te puedo alcanzar, volar dentro de tu cabeza, morir por tu espada, ser tu Diosa alada. Pero me derrumbo como arena de playa.
A veces en la penumbra de una noche cualquiera despierto. Tierra firme bajo mis pies, y veo que no puedo volar como tu. Espero que nadie nunca pueda volar a tu lado.

lunes, agosto 23, 2010

A veces esas palabras

El viento suele arrastrar tus ideas. Ellas se arremolinan como hojas de otoño dando vueltas en mi cabeza. Casi siempre me tumban, siempre que se trata de ella.
Y cuando cae la lluvia de la tarde que suele llevarse todo, puede, menos con tus ideales que se esconden en tus letras para destrozarme.
El pasado no es más que un recuerdo veloz, pero a veces esos pequeños fragmentos se convierten en monumentales ideales, y cuando llega la noche vivo bajo su sombra, que me recuerda que nunca llegué primero.
Un beso no basta cuando detrás tus filosas palabras cortan mi garganta.

jueves, julio 01, 2010

Gracia esporádica

Sólo por esta vez ella se detiene a pensar, pero sabe que no es la primera, siempre ha estado allí esa pésima idea. Hasta que aparece alguien, y ella piensa. Las comparaciones nunca han sido buenas, no son nada objetivas. Pero sabe que eso no importa. Y sabe que aunque su palabra esté sobre la mesa, a veces vale la pena darse la vuelta, y como si nada devolver esa bofetada, quizá sin intenciones premeditadas. Vale la pena?, se pregunta ella, creo que hace unas noches largas perdió la cuenta de las veces que se lo ha preguntado, sola en la oscuridad. Son todos los amaneceres resplandecientes? Pobre de ella, los años no le han enseñado nada. Siempre seremos eternos inexpertos en una vida con gracia esporádica. Y ella sabe que su gracia se ha ido esta vez, de nuevo.

jueves, junio 17, 2010

Unas manos frías, esperan.

Cada minuto es un adiós que me desgarra el alma, es una película en blanco y negro de extraños momentos que impresos en mis pensamientos me hacen viajar a un dulce pasado que ya no puedo palpar. Un recuerdo, un una lágrima, un adiós tardío que ya no puede pausar su llegada. Una pausa, un suspiro y mil promesas rotas como los cristales de mi alma, joven y maltrecha. Fingir ya no sirve de nada, sólo quedan palabras mal articuladas y un abismo kilométrico entre este último suspiro y tu indescifrable mirada. Y mientras yo me muero lentamente, tu te ríes sin ganas. Aquí estoy con las manos frías por segunda vez y tú no haces nada.
Ella espera...

viernes, mayo 28, 2010

Una luz que se apaga

Esa luz intermitente. Esa luz amarilla y poco ecológica que destella encima de mi cabeza, omnipresente. Esa que se apaga conmigo, y a la vuelta de la esquina se enciende de nuevo para acompañarme en esas largas noches de soledad en las que no estás. Esa nostálgica que recuerda el pasado con desgano y alumbra el futuro. Ese futuro incierto que nos juega malas pasadas. Esa luz está por apagarse de nuevo y dejarme en la oscuridad. Esa intermitente, luz impertinente.

domingo, mayo 16, 2010

Siempre puede ser peor

Seguramente son ideas mías. Cuando estas tranquila, al tope de esa sintética felicidad que viene en cajas de cereal con malvaviscos, todo se desborona. Y no termina, simplemente te quitan el premio pero aún tienes que pagar el saldo de la hipoteca, y vaya hipoteca! Y allí está ella, hasta en los cajones de su cocina. Y como no ponerse paranoica con todas estas señales del apocalipsis al cual están condenadas las relaciones? Soy Carrie Bradshaw ó es que nos pasa a todas? Cuando ya estas preguntándote si puedes seguir adelante, y después de todo no puede ser peor. Nunca digas que no puede ser peor, allí es cuando por obras del maléfico destino la ex aparece, con una tonelada de maquillaje, una falsa sonrisa metálica y con aspecto de travesti anoréxico a robarse el show, y él como desesperado por encontrarse con ella. Siempre puede ser peor! Seguramente son ideas mías.